Hoy vamos a ponerle nombre a eso que ya guía tu trabajo, aunque no siempre lo veas: la tesis invisible. No es un statement ni una frase bonita; es la pregunta central que orienta tus decisiones, materiales, escala, color, ritmo, método y exhibición, a lo largo de los años. Veremos por qué “tema” no es “tesis”, cómo esa pregunta te da continuidad entre series y cómo convierte tu proceso en investigación: pensar haciendo (Schön) y cambiar de forma sin perder el hilo (Oiticica). Si puedes decir con calma “mi obra investiga esto”, puedes decidir mejor, comunicar mejor y sostener una práctica reconocible. Prepárate para afinar tu brújula creativa.